sábado, 3 de mayo de 2014
42
Más explosiones de sentimientos van a acabar conmigo, querido corazón. Dependo de ti por completo, pues te pido consejo y siempre te obedezco. Soy sumisa a tu entera voluntad. Sin embargo, te odio. Eres un dictador en mi vida, y soy incapaz de desobedecerte, aun sabiendo que tus ordenes van a hacerme daño, sigo a tu vera, esperando a que algún día aciertes. Cuando me niego a someterme a ti, te envuelves en una capa de odio y reproches que, al latir, salen hacia afuera como fuegos artificiales. No es fácil quitarte de en medio, no es fácil acabar contigo. Aunque te rompan en pedazos, sigues latiendo veneno.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario