viernes, 7 de junio de 2013

Difícil expresarlo.

Muchas personas a veces no me entienden. ¿Por qué tacho 'a veces'? Porque fingen entenderme, porque dicen que todo lo comprenden, pero no lo hacen. No se puede juzgar a mal a una persona que está intentando entenderte, que se come la cabeza por ponerse en tu lugar, que intenta ayudarte pase lo que pase.
Sí, hablo de mi.
Yo tendré muchos defectos, más que virtudes sin duda, pero si hay algo que me identifica es preocuparme demasiado por ciertas personas. Yo no soy persona cariñosa con todo el mundo, no doy abrazos a cualquiera, ni digo 'te quiero' porque me apetezca. Yo o lo siento o nada. A mi me importa poco lo que la gente piense de mi pero lo que piense la gente que me importa, es lo más importante. Y valorar los pequeños detalles, y valorar a la gente, y valorar todo lo que tenemos. Y perder el orgullo cuando sea necesario, y conservar la dignidad sin arrastrarse tras de nadie, y ser feliz con la simple carcajada de personas que te importan.
Y darte cuenta de que la autoestima puede derrumbarse en un instante, y una sonrisa caída, una expresión que pasa de todo a nada.
Y todo esto, este cúmulo de cosas soy yo, la que confía en pocos, la que si la fallas deja de confiar, la que tiene sus preferencias como todo el mundo, la que quiere con locura, la que solo es cariñosa con ciertas personas. Y yo elijo en quién confiar, aunque no puedo elegir a quién querer. Pero las cosas son como son.
Y si te he dicho 'te quiero' de corazón, si te lo he demostrado y te he dado mi confianza, creedme, es la mejor señal que puedes tener de mi cariño.



No hay comentarios:

Publicar un comentario